Fraile: Psicologia de Plutarco

Plutarco mantiene el dualismo platónico-pitagórico entre alma y cuerpo (somapsyche), pero añade el Entendimiento (noûs), que es más elevado que el alma y más afín a la naturaleza divina (aristotelismo). El cuerpo puede compararse a la tierra, el alma a la luna y el entendimiento al sol. El alma es inmortal, y en la vida futura conocerá plenamente la verdad, y disfrutará de la compañía de sus amigos y parientes. Conocerá también a Dios, a quien en esta vida apenas podemos llegar a entrever. «Las almas de los hombres, mientras están envueltas en el cuerpo y rodeadas por las impresiones de los sentidos, no pueden comunicarse con Dios. Lo más que pueden es tocarle ligeramente, como entre sueños, por medio de la Filosofía. Pero después que abandonan el cuerpo y pasan a la región de lo que es puro, invisible e inmutable, Dios será su guía y su rey. Dependen de él, y contemplan insaciablemente su belleza, que es inefable e inexpresable para los hombres».

En Moral se inclina hacia el peripatetismo, reaccionando contra el rigorismo y la apatía de los estoicos. Pone la virtud en el medio entre el exceso (hyperbole) y el defecto (elleipsis). Pero admite la licitud del suicidio, y comparte las ideas cosmopolitas de los estoicos.

,