12. Las influencias de los distintos astros tienden realmente a unificarse, en tanto que cada uno de los seres que nacen recibe algo característico de esta mezcla, llegando a especificar así lo que él es y sus propias cualidades. Porque es claro que los astros no producen el caballo, pero algo le proporcionan; y si es cieno que “el caballo nace del caballo y el hombre del hombre”, también el sol colabora en su formación. Pues si el hombre nace de una razón (seminal), no es menos verdad que las circunstancias externas pueden perjudicarle o favorecerle. Siendo semejante al padre, el hijo, por lo general, está mejor hecho que aquél, aunque pueda, en ocasiones, llegar a ser peor. Todo esto, sin embargo, no nos hace abandonar nuestro propósito, bien que cuando prevalezca la materia, y no la naturaleza, el ser no alcance su perfección, al ser superada su forma por la materia.
Enéada II, 3, 12 — As influências dos astros se misturam entre elas
- Bouillet: Tratado 52 (II, 3) – DE L’INFLUENCE DES ASTRES
- Brisson & Pradeau: Alma do Mundo
- Brisson e Pradeau: Plano do Tratado
- Enéada II, 3 – Se a astrologia é de algum valor
- Enéada II, 3, 1 — Apresentação da doutrina astrológica
- Enéada II, 3, 10 — Os astros não produzem senão afecções corporais
- Enéada II, 3, 11 — A influência dos astros não mais a mesma uma vez descida
- Enéada II, 3, 12 — As influências dos astros se misturam entre elas
- Enéada II, 3, 13 — Princípio geral: nada pode modificar a razão que dirige o universo
- Enéada II, 3, 14 — Os astros não são senão um dos numerosos fatores que podem influir