Juan Filopón (fl. h.490-530), llamado así por su gran amor al trabajo y también «el Gramático». Se convirtió al cristianismo, aunque incurrió en la herejía triteísta. Fue un laborioso intérprete de Aristóteles. Comentó la Metafísica, las Categorías, los Analíticos primeros y segundos, los Meteoros, De generatione et corruptione, De generatione animalium, De anima y la Física. Después de su conversión al cristianismo escribió Contra los argumentos de Proclo para demostrar la eternidad del mundo (De aeternitate mundi contra Proclum), Siete libros de interpretación de la cosmogonía mosaica (De opificio mundi), donde se hace eco de la leyenda judaica de que el Timeo había sido inspirado en Moisés. (Excertos de Guillermos Fraile, História da Filosofia)